Aberturas: cómo elegirlas y cómo instalarlas


Parecen infinitas las decisiones que se deben tomar a la hora de construir un hogar. La cantidad de ambientes, el estilo del diseño, la elección de los materiales y la decoración de interiores son solo algunos de los aspectos a definir. Sin embargo, una cuestión que muchas veces no recibe la atención que merece es el complejo mundo de las aberturas.

Se trata de un aspecto clave en el proceso de construcción, ya que son las encargadas de la iluminación y ventilación de los espacios: la existencia de aberturas permite el paso de luz y viento, así como también regula la entrada y salida de frío o calor. 

Sin embargo, son tantas las opciones de aberturas que existen en el mercado que muchas veces pueden nublar tu mente a la hora de elegir. ¿Qué puertas son las indicadas para el dormitorio y cuáles para el comedor? ¿Conviene utilizar ventanas con cristales simples o dobles? ¿Exactamente, cómo se colocan? Si estas son algunas de tus preocupaciones, a continuación te ofrecemos una guía detallada para elegir las aberturas de la casa con confianza y entendimiento.

Distintas aberturas, distintos materiales

Además de los diferentes diseños, funcionalidades y precios que las distinguen, una de las elecciones fundamentales en lo relativo a las aberturas se vincula con el material de las mismas, de los cuales se destacan el aluminio, la madera y el PVC.  

Aluminio

Al construir, no hay nada más valioso que un material eficiente desde todos los aspectos, y es por eso que el aluminio forma parte de la perfilería más elegida cuando de aberturas se trata. Esto se debe a que los cerramientos de aluminio no se corroen ni se deterioran, ni se ven afectados por la radiación ultravioleta. 

Otras de sus propiedades se asocian a la hermeticidad, la aislación, la durabilidad y el bajo costo de mantenimiento, suficiente para posicionar a este material como una de las mejores opciones para las aberturas del hogar

Madera

Por otro lado, elegir aberturas de madera no solo garantiza una apariencia más cálida para tu hogar, sino también una durabilidad que incluso supera al aluminio, ya que en la actualidad reciben una serie de tratamientos en su fabricación que las hacen resistentes a agentes externos, tales como cambios atmosféricos o plagas de insectos. 

En adición, la madera es un material capaz de absorber ondas de sonido y de conservar el frío y el calor, es decir, es un excelente aislante térmico y acústico. A pesar de sus cualidades, el precio es mayor al aluminio, por lo que puede no ser la mejor opción para las aberturas de tu casa si tenés un presupuesto apretado. 

PVC

El policloruro de vinilo, más conocido como PVC por sus siglas en inglés, tiene como principal beneficio la eficiencia energética gracias a su hermeticidad y aislación térmica, que permite importantes ahorros en gastos de climatización. 

Además, las aberturas de PVC son ideales para viviendas en zonas de mucho tránsito, ya que actúan como una barrera ante ruidos exteriores por su capacidad de aislación acústica. Aun así, cabe mencionar que la desventaja de este material es su elevado costo, en comparación con las opciones anteriores.  

Puerta de PVC blanca con cortina levantada.

¿Cómo instalar una puerta?

Una vez que hayas seleccionado el material indicado para las aberturas, deberás aprender a colocarlas para continuar el proceso de construcción. En el caso de las puertas interiores, primero es necesario que instales el marco siguiendo esta serie de pasos:

  • Medí el marco y el encuadre, y luego verificá que todas las medidas estén iguales.
  • Verificá que todo el vano esté nivelado.
  • Perforá el marco de la puerta realizando huecos con una broca cada 30 centímetros. Luego, perforá el vano con una broca especial para concreto, utilizando de guía los huecos que realizaste en el marco.
  • Por último, fijá el marco colocando chazos para concreto y atornillá el marco al vano.

Ahora que el marco está listo, preparate para instalar la puerta siguiendo este procedimiento:

  • Primero, definí el sentido en el que se abrirá la puerta. Este paso es fundamental porque deberás ubicar las bisagras en consecuencia, ya sea del lado derecho o izquierdo. 
  • Luego, marcá con un lápiz en el costado de la puerta y en el marco la ubicación y tamaño de las bisagras para poder perforar posteriormente.
  • Asegurate que la distancia entre las bisagras sea la correcta. Recordá que siempre es recomendable instalar tres, a menos que la puerta exceda los 25 kilos.
  • Luego, abrí cuidadosamente los huecos necesarios en la puerta guiándote por las marcas realizadas, y fijá las bisagras a la puerta con los tornillos.
  • Por último, instalá la puerta en el marco, repitiendo el paso anterior pero abriendo los respectivos huecos en el marco de la puerta.

Para estar seguros, revisá que todo funcione correctamente y que la puerta se pueda abrir y cerrar de forma fluida. En ese caso, ¡tu puerta está lista!

Instalando una puerta corrediza

Haremos una pequeña distinción para este tipo de aberturas en particular, así que enterate a continuación cómo instalar una puerta corrediza:

  1. Lo primero que debés hacer es la abertura, que será el sitio en el que irá la puerta corrediza. Hay dos opciones: que sea externa y tenga rieles por fuera de la pared o que entre en la pared. En este último caso, verificá que el ancho de la pared sea lo suficientemente grueso como para ocultarla. 
  2. Una vez definido el lugar adecuado para la puerta corrediza, marcá con un lápiz para trabajar mejor. 
  3. Luego, retirá el panel de yeso de uno de los lados de la pared hasta el lugar donde quedaría la viga.
  4. Terminados con los paneles, podemos pasar a cortar los montantes que quedan a la vista, así se crea el espacio para el nuevo marco. Tené en cuenta que el espacio debe ser lo suficientemente grande como para que se desplace sobre los rieles sin inconvenientes.
  5. Para instalar los rieles, es importante que te guíes por las instrucciones dadas por el fabricante y que utilices tornillos para unir los soportes a los montantes. Quedate pendiente por si tenés que recortar el riel para ajustar el largo.
  6. Continuá con las piezas correspondientes en el riel: coloca los colgadores en la parte superior y desliza los soportes con ruedas dentro del riel superior. Enganchá los colgadores a los soportes y ajustá hasta que quede colgando a la altura precisa.

Una vez más, comprobá que tu puerta corrediza se deslice suavemente para asegurarte de que terminaste la instalación de forma exitosa.

Ventanas: cuál elegir y cómo colocarlas

¿Qué tamaño de ventana es el ideal?

Al elegir las aberturas en el proceso de construcción de una casa, hay varios factores a tener en cuenta para determinar el tamaño ideal de las ventanas. En primer lugar, se debe definir la función de la habitación, ya que no es lo mismo una sala de estar, en la que es recomendable que las ventanas sean grandes para aprovechar al máximo la iluminación natural, que un dormitorio en el que se busca mantener la privacidad y reducir la entrada de luz durante las horas de sueño. 

Por otro lado, la orientación de la casa también influye en la elección del tamaño de las ventanas. Por ejemplo, si la casa está orientada hacia el norte, se puede maximizar la entrada de luz natural y ventilación mediante el uso de ventanas más grandes en esa dirección. En cambio, con una orientación hacia el sur, puede ser necesario aumentar el tamaño o número de ventanas para compensar la falta de luz natural. 

Por último, el elemento de la estética también es importante. Considerá la simetría, el equilibrio y tu gusto personal para determinar el tamaño y la ubicación de las ventanas en la fachada de la casa.

Persona instalando una ventana blanca.

Instala una ventana como un experto

Ahora que tenés en mente qué ventana elegir para tu hogar, seguí los siguientes pasos para instalarlas de forma correcta:

  • Primero, recordá que las ventanas se instalan después de completar la estructura básica de la casa, una vez que se hayan completado todos los trabajos de electricidad y plomería que puedan necesitar pasar a través de las aberturas de las ventanas.
  • Empezá verificando las medidas del hueco en la pared y de la ventana. Lo ideal es tener un espacio de 5mm para el sellador de impermeabilidad.
  • Retirá las hojas del marco para tener una mejor maniobra y ligereza.
  • Sobreponé la ventana en el hueco y trazá una línea recta en éste con una regla de nivel. Guíate de esta línea para instalar la ventana y que quede bien recta.
  • Fijá los tornillos ligeramente en los huecos del muro.
  • Verificá una vez más la posición de la ventana y, cuando todo esté correcto, apretá los tornillos.
  • Instalá las hojas del marco de nuevo.
  • Por último, aplicá el sellador de impermeabilidad para cerrar el espacio entre el muro y el marco de la ventana. 

¡Listo! Una vez que termines estos pasos tu ventana debería verse bien y poder abrirse y cerrarse correctamente.

¡Las aberturas definen al hogar!

Como ya hemos mencionado, un espacio bien iluminado y ventilado es producto de la elección de las puertas y las ventanas. Es decir que las aberturas no solo son aspectos cruciales en la etapa de construcción, sino que también influyen en el futuro funcionamiento cotidiano de la vivienda. Por eso es fundamental que tomes decisiones con la información correcta y precisa, si es que querés hacer de una simple casa, un hogar.