Muchas personas están enamoradas del estilo de decoración interior elegante y sobrio, pero no cuentan con el presupuesto necesario para tener acabados en piedra, mármol u otros materiales de primer nivel. Si sos de esas personas, no te preocupes: la buena noticia es que este estilo puede lograrse en el piso aplicando porcelanatos y cerámicas, un material económico que imita al natural. ¡Aprendé todo sobre ellos para poder tener un ambiente elegante!
¿Cuál es la diferencia entre cerámico y porcelanato?
El porcelanato y la cerámica son materiales muy parecidos: ambos se aplican en pisos y paredes y tienen una instalación similar. Pero, aun así, no son lo mismo y hay ciertos casos donde se recomienda colocar uno por sobre el otro.
Su mayor diferencia radica en la fabricación: el porcelanato se fabrica a mayor calor que la cerámica, lo que lo hace más compacto y, por lo tanto, resistente. El porcelanato soporta más peso que la cerámica, lo que significa que puede colocarse en ambientes con muebles robustos e incluso en cocheras o industrias. Por su lado, el piso de cerámicos esmaltados cuenta con el beneficio de la resistencia al desgaste por abrasión: es decir, es más adecuado para los ambientes con mucho tránsito.
También es importante destacar que presentan distinta capacidad de absorción de agua. La cerámica alcanza una absorción media y alta, por lo que se recomienda colocarla en climas secos y templados. El porcelanato, al ser compacto, no absorbe mucha agua ni humedad y es aconsejable instalarlo en zonas de nieve, escarcha y donde se produzcan cambios de temperatura bruscos.
Beneficios de sumar porcelanatos y cerámicos a tu hogar
Ya habiendo visto sus diferencias, ahora podemos avanzar a los beneficios que comparten la cerámica y el porcelanato. En primer lugar, son un material muy económico que luce muy sofisticado, ya que imita a otros materiales más caros, como el mármol, la madera o la piedra.
Además, son muy versátiles: no solo pueden colocarse en pisos y paredes, sino que también hay diseños para todos los ambientes de una vivienda. Así, podemos tener un piso de cerámicos o porcelanatos en un baño, una cocina, una habitación o una sala de estar.
En relación a este último punto, en el mercado existen porcelanatos y cerámicas de muchos diseños y colores distintos, adaptándose al gusto de cada uno. Incluso también se pueden combinar para hacer diseños de suelos personalizados y creativos.
Por último, su colocación tanto en paredes como en pisos es muy simple, por lo que podemos hacerlo nosotros mismos.
¿Cómo instalarlos en pisos y paredes?
Colocar cerámica y porcelanato en pisos y paredes es simple. Si querés encarar ese proyecto, seguí las siguientes instrucciones:
Colocar porcelanatos
- Limpiar la superficie, dejándola lisa y nivelada. Es el momento para reparar cualquier imperfección o hueco.
- Medir cada porcelanato y trazar líneas rectas que indiquen dónde irán colocados en el piso o pared.
- Colocar el adhesivo y peinarlo con una llana dentada, de modo que quede parejo en toda la superficie.
- Apoyar las piezas y presionarlas para que se peguen. Podés ayudarte con un mazo. Recordá dejar un espacio de al menos 3 milímetros entre cada una (se recomienda usar separadores).
- Quitar los separadores y colocar más mezcla adhesiva para llenar los espacios.
- Después de tres horas, limpiar el sobrante con agua y una esponja o trapo.
Es muy importante que no pises el porcelanato hasta que pasen 24 horas de su instalación o tu trabajo podría arruinarse. Luego de que transcurra ese tiempo, podés limpiarlos para eliminar manchas o restos de adhesivo.
Instalar cerámicos
- Quitar las cerámicas viejas.
- Alisar la superficie, de manera que quede nivelada. Si hay desniveles, podés emparejarlos con yeso y llana lisa.
- Medir dónde se colocará cada baldosa y hacer una marca, dejando la separación indicada entre ellas.
- Colocar el adhesivo sobre la superficie.
- Instalar cuidadosamente cada cerámico, respetando las marcas previas.
- Asegurarlos con pequeños golpes.
- Llenar las juntas con pastina.
- Retirar el excedente de pastina con una esponja y agua.
Realizando el mantenimiento adecuado
Ambos materiales se limpian de manera muy similar. Básicamente, como en la mayoría de los pisos, no se recomienda usar productos abrasivos: es mejor utilizar el detergente común o productos comerciales específicos para porcelanatos y cerámicos. Si hay alguna mancha difícil, como de vino, café o jugo, se puede aplicar vinagre diluído para eliminarla. Otro tip es utilizar bicarbonato disuelto en agua para limpiar manchas de grasa.
La vida útil de la cerámica y porcelanato puede alcanzar hasta los 100 años, siempre que esté bien cuidado y con una correcta instalación. Para esto, se recomienda colocar fundas en las patas de los muebles y, así, evitar rajaduras o grietas por el uso.
¡Disfrutá de un material económico y de diseño!
Como hemos desarrollado, los cerámicos y los porcelanatos nos permiten tener un acabado elegante en casa sin tener que gastar una fortuna. Seguí nuestras recomendaciones para mantener tus pisos y paredes sanas y brillantes y dedicate a pensar en una decoración que combine con la nueva estética.
¿Ya sabés en qué ambiente vas a colocar porcelanato y cerámica?
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