Aprendé cómo optimizar los espacios de almacenamiento del baño


Uno de los lugares donde más objetos se guardan, ya sean de higiene personal, de limpieza, toallas u otros, es el baño. Paradójicamente, es uno de los espacios más pequeños de una casa, si lo comparamos con la cocina o las habitaciones. Es por eso que debemos ingeniárnoslas para encontrar formas de guardar la mayor cantidad de cosas posible, sin que se convierta en un depósito.

En este artículo, te daremos las claves para optimizar tu almacenamiento de baño.

Organizar antes de ordenar

Marie Kondo, la gurú de la limpieza y el orden, dice que antes de comenzar a ordenar, se debe organizar y deshacernos de todas las cosas que no usamos. Y, si lo razonás, tiene toda la razón: al tirar productos, se hace más espacio para los verdaderamente necesarios.

Una buena táctica para comenzar es separar todos los productos que estén vencidos o vacíos y tirarlos. Luego, revisá cuáles usás regularmente, cuáles de vez en cuando y cuáles nunca: a los primeros hay que darle un lugar más accesible que a los segundos y los terceros se deben regalar o tirar. 

Después, podés separar en categorías, como limpieza, productos para el pelo, productos para el cuerpo y así. Entonces, toca buscarle un lugar diferenciado a cada categoría para que sepas exactamente dónde buscar. ¡No hay nada peor que dar vueltas sin poder encontrar un producto!

manos poniendo una caja contenedora de mimbre en un mueble de baño.

¿Cuál mueble de baño me conviene?: estilos y diseños

Una vez definidas las categorías, es momento de elegir dónde guardar los productos. Ahí es donde entran en juego los muebles de baños. Si contás con un espacio grande, podés incluir armarios, que te proveerán de mucho lugar de almacenamiento y hasta cajones. Luego, están los botiquines, que se sujetan a la pared. O, si te gusta que las cosas queden a la vista, podés poner repisas, ya sea en un mueble con varias o una sola repisa adosada a los muros.

Vanitorys: practicidad y elegancia

Los vanitorys son una gran opción, ya que ahorran espacio y, por lo general, no dejan a la vista su contenido. En la mayoría de los baños, se utilizan para guardar las toallas y productos de limpieza, aunque también puede utilizarse para colocar los productos que debemos aplicar después de la ducha, como productos de afeitar, cremas, etc. 

Los hay con un gran compartimiento, con cajones o con una combinación de ambos. Los cajones siempre son una buena alternativa para las familias o las parejas, así cada integrante puede tener su propio almacenamiento, en lugar de que estén todos los elementos juntos. Otro tipo de vanitory es el que combina cajones con repisa, como el Oak. Es perfecto para personas que viven solas y no tienen tanto que guardar.

persona colocando un cepillo en el cajón de un vanitory.

¿Cómo optimizar el almacenamiento en baños pequeños?

Todo esto suena muy bien, pero ¿qué hacemos cuando nuestro baño tiene el espacio contado? No te preocupes: también puede ser ordenado y contar con muebles que sumen en lugar de restar. Solo se debe pensar en soluciones creativas.

Un ejemplo de esto son los carritos con ruedas, que te permiten tener un lugar de almacenamiento móvil. Entonces, se puede cambiar de lugar para que no estorbe tus pasos a la vez que guarda los objetos. 

Ya mencionamos las repisas (que, adosadas a la pared ahorran lugar) y a los muebles organizadores, pero ¿habías pensado en colocar un mueble organizador con repisas sobre el inodoro? Conseguirías optimizar el espacio y usar un lugar que comúnmente se considera perdido.

Finalmente, todo baño necesita un espejo. ¡Considerá tener uno con espacio de almacenamiento oculto! Aunque el lugar no suele ser muy grande, es perfecto para guardar cosas pequeñas, como perfumes, maquillaje, medicamentos, etc.

¡Hacé que el orden perdure!

Un baño innovador debe tener orden pero, mayormente, ese orden debe durar. ¡De nada sirve ordenarlo solo cuando apenas se lo construye!

Sabemos que es difícil, incluso más cuando se tienen niños en la casa. Es por eso que muchos utilizan un sistema de diferenciación. Por ejemplo, con cajas contenedoras de distintos colores, señalizando que cada color corresponde a distintas categorías de productos. O, en lugar de colores distintos (para no romper con la hegemonía), se puede etiquetar cada caja contenedora con qué tipos de productos alberga. Así, te acostumbrarás más velozmente a los cambios en la organización.

Te aseguramos que, una vez que consigas un orden en tu baño, la reposición de productos y su limpieza será muchísimo más fácil y rápida.

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