Espejos: el elemento clave para decorar tu hogar


Se cree que los primeros espejos del mundo datan del año 6000 a.C. y eran de obsidiana (vidrio volcánico), habiendo encontrado restos de estos en Turquía. Aunque hoy en día lo relacionamos con un ítem accesible y presente en todos los hogares, los espejos supieron ser muy caros y un símbolo de lujo para reyes y personas de la aristocracia. Lo cierto es que, tanto en la antigüedad como actualmente, estos no solo tienen un objetivo funcional, sino también decorativo.

Aprendé cómo colocar espejos en tu casa para potenciar su decoración y mejorar tus espacios.

Claves para sumar espejos a tu casa

Dentro de la decoración, hay muchos tips que uno puede seguir para crear distintos efectos visuales, estilos o focos de atención. Esto es muy personal y dependerá del gusto de los habitantes del hogar, pero sí es necesario dar algunas recomendaciones de seguridad para que sumar un espejo no signifique un peligro ni te reste estilo.

Primero, es necesario elegir bien la habitación: no es recomendable colocar espejos muy grandes en dormitorios de niños o salas de juegos, ni cerca de donde duermen las mascotas, para eludir accidentes. Por otro lado, se debe tener en cuenta que un espejo puede arruinarse frente al calor, por lo que se debe evitar colgarlo sobre una estufa o en un sitio donde le pegue el sol constantemente. Por último, si no sos fan de la limpieza, considerá colocar tu espejo alejado de puertas o ventanas principales: así lo mantendrás libre de polvo excesivo.

Ideas para decorar con espejos

Ahora sí, podemos pasar a la inspiración para que logres tener ambientes decorados según tu estilo favorito. Hay algunas ideas que se repiten constantemente en Pinterest, Instagram o revistas de decoración y solo se necesita contar con el espejo indicado:

Espejos vintage

El estilo vintage ya está instalado como uno de los favoritos: puede aplicarse en el comedor, la cocina, dormitorios e incluso en el baño. En este último ambiente, los espejos cumplen una función vital: un gran espejo redondo, junto a los accesorios indicados, es perfecto para lograr una decoración antigua y darle tu impronta al baño.

Mujer en el baño frente a un espejo redondo, haciendo skin care.

Formas modernas

Si el estilo vintage no es lo tuyo, podés optar por uno más moderno al sumar espejos de formas irregulares. Estos añaden mucha personalidad al ambiente y se suelen colocar en dormitorios o vestidores, pero también es una buena idea usarlos en salas de estar, reemplazando los tradicionales cuadros.

Espejo con luz propia

Los espejos con luces led llegaron para quedarse: son perfectos para maquillarse, realizar una rutina de skin care o incluso para sacarse fotos, por lo que abundan en los baños y dormitorios. Los hay pequeños y también de cuerpo completo.

Espejos multifunción

En baños pequeños, siempre queremos ahorrar espacio y lograr un efecto visual amplio. Una buena opción para evitar sumar muebles innecesarios es elegir un espejo con repisa o con botiquín (es decir, que se abra y revele espacios de guardado detrás). Son muy útiles para colocar elementos de primeros auxilios, cosméticos, productos para el cabello y otros objetos pequeños.

Antebaño con espejo led redondo y vanitory de madera con toallas y una estatua de buda.

Paredes de espejos

Si hablamos de agrandar espacios, una de las técnicas más usadas es tener una pared entera con espejos para “correr” visualmente los límites de la habitación. Aun así, los decoradores recomiendan limitarse a un solo muro, ya que dos espejos enfrentados pueden provocar el “efecto infinito” y marear a las personas.

¿Cómo colocar un espejo de forma correcta?

Hay distintas formas de colocar un espejo según el peso y tamaño de éste y el material de la pared elegida. Generalmente, se usan tornillos o pegamento especial.

Primero, es recomendable apoyar el espejo en el lugar elegido y marcar una referencia para asegurarte de que esté derecho y en simetría con el resto de los muebles. Luego, si elegís perforar, seleccioná la mecha adecuada para el tipo de pared y hacé los agujeros. Colocá los tarugos indicados, dales un pequeño golpe con el martillo para comprobar que estén firmes y atornillá los soportes del espejo. Esta técnica es ideal para espejos pesados o muy grandes.

Si tu espejo es más pequeño, podés pegarlo a la pared usando cinta doble cara para espejos o un adhesivo especial, asegurándote de limpiar bien la superficie primero y siguiendo los pasos del fabricante.

¡Lográ una decoración que te refleje!

Los espejos son una excelente opción para decorar tu hogar y sumarle estilo. Además, son económicos y fáciles de limpiar: solo necesitás un paño de microfibra y limpiador específico de espejos. ¡Incluso, muchos aseguran de que el secreto para que brille es pasarle papel de diario!

¿Qué estás esperando para reflejarte en tu hogar?